Las direcciones URL son recursos únicos que se dan a una página web. Estas son como las huellas dactilares, únicas e irrepetibles, es decir, no hay dos iguales. En teoría, cada URL válida apunta a un único recurso. Si esta página se elimina o se cambia la ubicación se tienen que utilizar las redirecciones, para que los usuarios y los principales motores de búsqueda la redireccionen evitando los errores de búsqueda.

Estas redirecciones de URL son necesarias para mejorar el posicionamiento SEO de tu página web. Si una página web cambia de ubicación o se elimina y no se redirecciona la URL, cuando los usuarios busquen la web aparecerá el tan conocido error 404 o 300. Esto hará que el usuario abandone inmediatamente la página, aumentado la tasa rebote y afectando negativamente a tu página web.      

Las redirecciones se utilizan cuando se cambia la URL de una página web; se elimina una página que todavía recibe tráfico y backlinks; al cambiar la estructura de una página web o el dominio completo; se migra de HTTP a HTTPS, también cuando se quiere evitar el duplicado de contenido entre las URL con «www» o sin ella.

¿Cómo se hacen las redirecciones de URL?

La forma más sencilla y común es mediante un plugin. Ya, casi todos los CMS tienen plugins que puedes descargar de forma gratuita y que llevan a cabo esta misión.

También es posible realizar las redirecciones desde los archivos del servidor, por ejemplo, editando el archivo «.htacccess» del sitio para servidores Apache o añadiendo un bloque de servidor al archivo «nginx.conf» para servidores Nginx.

Existen diferentes tipos de redirecciones, esta dependerá siempre del motivo por el que se vaya a realizar la redirección. Estos son los tipos que puedes encontrar:

  • 301 y 308: indican que la URL original ha sido movida permanentemente a una URL.
  • 302 y 307: son redirecciones temporales, en este caso el contenido original seguirá indexado en Google y continuará posicionándose.
  • 303: se trata de una redirección de escaso uso, su función es indicar que se redirige al usuario a otra página, que no es de creación reciente, como es el caso de una página de carga.
  • Redirecciones Meta Refresh: estas se realizan desde el servidor. Para ello, es necesario añadir un código a la sección «» para indicar al navegador que se dirija a otra página. Esta no es muy recomendable ya que según Google la experiencia del usuario es negativa.

No descuides tus URLs ni enlaces caídos, pues te hará perder posiciones entre los principales motores de búsquedas. Es una parte primordial del SEO y de mejora de la experiencia del usuario.